Yormary Álvarez: la nueva perla del fútbol femenino

Ha sido llamada en varias ocasiones por la Selección nacional

Yormary Álvarez: la nueva perla del fútbol femenino

Presente y futuro del Deportivo JBL en la rama femenina. Su destreza y pasión por un deporte que sigue en constante crecimiento en el país le han abierto las puertas para hacerse un lugar en el combinado patrio y liderar el sueño de muchas jóvenes zulianas que aspiran poder destacar vestidas en corto.

Fantasías de fútbol

Yormary Andrea Álvarez Zambrano siempre prefirió dejar de lado las muñecas para ir a tocar un balón, con la misma alegría y sencillez con la que todavía juega y entrena junto a sus compañeras. Aunque en su familia el deporte siempre estuvo presente, fue su tío materno, amigo, cómplice y asesor futbolístico, Antonio Alarcón, y quien aún la acompaña a los módulos de la Selección, que con ojo conocedor supo que a base de esfuerzo y práctica las aptitudes que ella demostraba informalmente luego marcarían la diferencia.

16 años cumplidos hace poco y el orgullo ya no cabe en el pecho, Yormary se ha erigido como el símbolo representativo de lucha de los barrios luego de la Curva de Molina, sector marabino de donde proviene y de estrechos recursos, a los que como familia han tenido que sortear entre los oficios de trabajadores informales y obreros de sus padres, para darle lo necesario a la futbolista del Deportivo JBL y su hermana mayor de 19 años, a las que une una buena relación.

A los ocho años lo que era un capricho se convirtió en una meta. Según expresó Alarcón, la insistencia de la niña llevó a la familia a iniciarla en la práctica del deporte en la cancha de La Rotaria, y posteriormente cuando pidió pertenecer a un equipo se inscribió en Petroleros del Zulia, hasta que la reconocida entrenadora de experiencia Liria Andrea Ferrer observó su talento y la vistió de negriazul.

Talento prometedor

El 2014 fue el año de inflexión en la posterior carrera deportiva de Yormary. Ferrer observó algo distinto en una niña de corta estatura pero amplios sueños, que tenía dentro de sí potencial para explotar. “Yormary llegó con cualidades técnicas muy buenas pero sin mucha perfección. Noté que trabajándola más sería una excelente jugadora”, apuntó Ferrer sobre a quién en la actualidad se ha referido en varias ocasiones como su pupila.

El trabajo constante y disciplinado tal como lo requiere el mejoramiento en esta disciplina, que empezó por aquellas cualidades técnicas en las que potencialmente Álvarez pareció poder destacar, hasta evolucionar a la ubicación táctica donde dio sus primeros pasos como volante ofensivo y contención, no obstante, siempre destacó en la primera por sus características como explosividad, rapidez, polivalencia, educada pegada, gallardía, liderazgo; le avalaron las recientes cuatro convocatorias a módulos Vinotinto de la categoría Sub-17, consagrándola como la nueva promesa del fútbol zuliano.

La titularidad en los partidos del torneo organizado por la Asociación de Fútbol del estado Zulia (AFEZ) en los que JBL siempre ha competido en sus ramas masculinas y femeninas se volvió algo constante. Una pequeña líder estaba surgiendo y su disciplina, orden y dedicación al fútbol la hicieron siempre destacar del resto: “es un poco reservada, de carácter dócil y amigable, pero hoy puede decir que llegó a su sueño: la Selección nacional”.

El gran llamado

Nuevamente el sueño se volvió realidad y el módulo de la Vinotinto Sub-17 en Maracaibo tocó su puerta. Yormary recibió en ese momento su primer llamado al combinado nacional y además compartió junto a su ídolo, Deyna Castellanos. Más allá de esto, fue una experiencia cambiadora de vida pues aprendió del sacrificio, aumentó su interés por formar parte de aquello y se fijó la meta de la titularidad.

Para la dorsal número 10 de la Maquinaria Femenina, esta importante consideración es una meta alcanzada de muchas que le faltan por lograr a nivel profesional: “Estoy muy orgullosa por ser la primera que representa a JBL en esta categoría con la Selección y ser la única de la región significa mucho para mí. Si Dios y la Virgen me lo permiten, podré cumplir mi sueño de vestir la vinotinto como profesional y siendo parte de JBL, esa es mi mayor ilusión”, comentó la propia jugadora.

Participar de los llamados criollos le ha valido evolución puesto que ha tenido que dejar su posición natural y adaptarse a jugar por la banda: “Tenemos que estar preparadas para todo y si el ‘profe’ Catoya vio talento en mí para jugar de lateral derecho, asumo el reto y daré lo mejor de mi cada partido”, explicó.

No pasa desapercibida

El talento de la joven ha llegado a la visión del estratega nacional dos veces mundialista con la Vinotinto Sub-17 y Sub-20, Kenneth Zseremeta, que en su estadía en Maracaibo en el último módulo de la Selección antes de partir a Colombia, confesó sentirse interesado por lo que Yormary demostró en la cancha.  “JBL cuenta con muchas chicas interesantes que he podido observar pero destaco lo de Álvarez, es una jugadora para no perder de vista”, dijo en el postpartido.

“Yormary es una joven que tenemos que seguir afinando en la Selección y en su equipo porque actitud y talento le sobra. Estoy considerando tenerla en cuenta muy próximamente en la Sub-20, para ver su desenvolvimiento con jugadoras de mayor roce y ver lo que me puede ofrecer por la banda derecha. No le tiembla el pulso”, destacó el entrenador.

En efecto, el asistente técnico y mano derecha de Zseremeta, Gerardo Contreras, también tuvo una opinión similar al verla en los diversos bloques que disputó: “es una jugadora destacada con buenos fundamentos técnicos, buen dominio de la composición corporal y que aporta vistosidad”, añadiendo que posiblemente será recurrente en próximas convocatorias.

Para Liria Ferrer, la satisfacción, orgullo y felicidad atraviesan su mente cuando piensa en ella. “El ‘profe’ (Zseremeta) es sabio y de mucha experiencia y saber que habla bien de una jugadora zuliana nos permite saber que hemos aportado con nuestro trabajo al desarrollo del fútbol regional, primero con Michelle Romero, ahora Yormary, demostrando que hay jugadoras de nivel en el estado para poder formar parte de una Selección”, expuso.

Brillando con luz propia

Un futuro inimaginablemente prometedor está en las puertas de Álvarez, así como lo hizo Deyna Castellanos la mayor referente del balompié femenino criollo, destacar en la Selección nacional le permite exposición, perfeccionamiento de cualidades y la posibilidad de optar a una beca académica para vivir la experiencia de jugar en el extranjero. “Deyna ha permitido que todas las chicas que practican la disciplina sigan sus pasos y ser su motivación, sin embargo, Yormary tiene muchas cualidades para lograr lo que ella ha hecho”, auguró Ferrer.

En este sentido, el objetivo de Álvarez es claro y por lo pronto es estar en el Sudamericano de la categoría el año entrante por lo que se encuentra trabajando en ello: “Me enfoco en dar lo mejor de mí en cada entreno o partido como lo vengo haciendo. También, aprovechando al máximo cada oportunidad que me dan para que me sigan tomando en cuenta”.

A pesar de su enorme proyección a nivel regional, Yormary sigue siendo una adolescente amigable que disfruta como cualquier otra de escuchar música, jugar videojuegos y estudiar. De hecho, su sueño además de la internacionalización, es graduarse en licenciatura en Educación Física, como su tío, por lo que prosigue con sus estudios de bachillerato en el colegio General Laurencio Silva.

Yormary, convertida en referente de la institución y un joven prospecto para seguir puliendo, se afianza como uno de los baluartes de JBL en el desarrollo y consolidación del talento regional, una futbolista que hay que seguir y una esperanza para continuar demostrando internacionalmente el potencial futbolístico en el campo femenino en Venezuela. 

Por: Mariangel Ferrebú Gervez y Oscar Sánchez

Fotos: Pedro Luis González

Prensa Deportivo JBL del Zulia

@DvoJBLZulia

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